Y si a mi también me llegó una invitación, como si no tuviera suficiente estrés, y en efecto, las redes sociales están llenas de comentarios acerca de la falta de sensibilidad del fisco en esta época que parece sacada de una película de ciencia ficción.
No tomen una decisión sin considerar que la computadora del SAT nos lleva ventaja porque no se cansa, no se enferma y no tiene temor de Dios.
A lo mejor le da otro tipo de virus, mientras tanto las invitaciones llegan al por mayor, así que en la medida de lo posible seamos congruentes.
Luego dijo Jesús a sus discípulos: —Los tropiezos son inevitables, pero ¡ay de aquel que los ocasiona!
Lucas 17:1 NVI
