Si tienes un negocio dentro del sector comercial, es probable que seas la persona que se encarga del área administrativa, financiera y fiscal. Las MiPyMes aprenden de manera empírica, o sea, con prueba y error. En caso de que atiendas o tengas a tu cargo a alguien en la caja registradora, es necesario que hagas el cierre de cajas y el arqueo.
La finalidad del cierre de cajas y el arqueo
El arqueo es el análisis de ganancias en efectivo y de otros métodos de pago. Se hace la comparación de lo que hay en el sistema y el dinero reflejado. Con los resultados obtenidos, podrás observar si las cuentas coinciden y si hace falta o sobra saldo.
Este procedimiento puede ejecutarse mensualmente o de manera sorpresiva. Es recomendable hacerlo en presencia de la persona que esté a cargo de la caja. Al concluir el arqueo, se hace un acta del mismo.
El cierre de cajas te ayuda a tener un control de la entrada y salida de dinero. Utilízalo en cada cambio de personal y después del arqueo. Siempre mantén un fondo para cambio y procura que sea la misma cantidad en cada caja. Esto te ayudará a tener mejor control cada vez que hagas un arqueo.
Mientras mayor orden, mejor seguridad
Como te decía anteriormente, el riesgo de las MiPyMes es que experimentan con prueba y error. No tienes por qué exponerte a que si sobra o en el peor de los casos, falta dinero en tu negocio.
Es importante hacerte saber que para el cierre de caja y arqueo tienes que hacerlo caja por caja, no puedes registrarlo como un solo proceso. Ahora, a esto suma las veces en que vas a hacer que coincidan las cuentas sin error. ¿Suena muy tedioso, no? No todo está perdido. Existen sistemas que se encargan de eso, como Punto de Venta C2K, que te permite llevar a cabo los procesos de la caja registradora mediante la captura de movimientos.
Si las cuentas no cuadran, no saques conclusiones precipitadas sobre la persona encargada de la caja. Establece el diálogo para que pueda explicar qué fue lo que salió mal. Recuerda que una buena comunicación beneficia a tu empresa.
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