La NOM-037 ha dado de qué hablar en estas últimas semanas. Esta norma salvaguarda las condiciones laborales y de higiene en materia de teletrabajo. En donde se destaca el pago proporcional de luz e internet por parte del patrón y la reversibilidad del también llamado “Home office”.
Pero primero hay que plantearnos si esta modalidad todavía es funcional y qué trabajadores pueden aplicar.
¿Cuánto cuesta mantener un empleado?
Esto puede tener dos puntos de vista. El primero es que se considera que es más caro mantener un empleado de manera presencial; Y el segundo es que se gasta más cuando los empleados trabajan desde casa.
La Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) estima que el teletrabajo le ahorra a las empresas $86 mil al año. Esto, si consideramos que el trabajador trabaja 3 días con esta modalidad. Pero también hay que considerar que es una inversión mandar al personal con esta modalidad.
Parte de la norma, indica que los patrones tendrán la obligación de pagar una parte proporcional del servicio de internet y electricidad. El cual, va a depender de la estación del año.
Además de brindar el equipo y mobiliario adecuado para que los trabajadores puedan desarrollar sus actividades. A pesar de que la norma todavía no entra en vigor, es recomendable implementar con tiempo los requerimientos.
Home office: La ventaja que perdura
Una de las razones por las que ahora los candidatos buscan un empleo con la posibilidad de trabajar desde casa, es para ahorrar tiempo al transportarse. Se sabe que en promedio, la población residente de la Ciudad de México y el Área Metropolitana, pasan entre 1 a 2 horas para transportarse de la casa al trabajo y viceversa (CEPA. 2022).
¿Cuánto tiempo seguirá esta opción?
En la actualidad, la comodidad del trabajo híbrido tiene sus razones. La versatilidad para desarrollar actividades laborales en dos zonas y al mismo tiempo complementar ideas fuera de la rutina.
Al ser seres sociales, no estamos acostumbrados al aislamiento y lo vimos durante la pandemia. Por lo que la comunicación e interacción física entre los compañeros de trabajo no se puede reemplazar. Además de los problemas psicológicos que desencadena el aislamiento.
En conclusión, el home office seguirá en algunos empleos, no completamente porque se ha demostrado que la ocupación de oficinas ha aumentado. Aunque hemos regresado a las actividades presenciales, no podemos dejar atrás las comodidades de trabajar sin salir de casa. Además de que se demostró que para algunos empleos, la presencia en los centros de trabajo no es necesaria.