Durante estas fechas, todo es risas y celebraciones pero, pocos se organizan para saber qué acontecimientos se pueden lograr durante el próximo año. No es adecuado planearlas unos minutos antes de que termine el último día de diciembre y mucho menos en el ámbito empresarial.
El cierre anual para una empresa no quiere decir que hay un borrón y cuenta nueva, al contrario, es una etapa en donde, con anterioridad analizaste que es lo qué funcionó y en qué aspectos se puede mejorar.
Si creías que presionar o exigirle más al trabajador es la solución para cumplir los propósitos empresariales, déjame decirte que es una idea errónea. Sin embargo, hay prácticas que son guía para lograr las metas dentro de una empresa. A continuación te contamos lo que claramente no debes de hacer.
No dejar la planificación financiera para el próximo año
Hay que dejar atrás la popular creencia de que dejamos todo a último momento. Comenzar a planificar puede sonar como una tarea larga, sin embargo, no hay paso más importante que iniciar, en vez de aplazarlo.
Comienza con el análisis de los resultados que tu empresa ha tenido durante el año. Los imprevistos que sucedieron y cómo se resolvieron (o no), los logros presentados, sean buenos o malos. Todos estos acontecimientos cuentan.
No descuidar la atención al cliente durante las festividades
Al manejar toda una empresa, tratas con clientes, empleados, proveedores, distribuidores, etc. Tomate el tiempo para avisar qué es lo que harás durante las semanas más importantes, en este caso las fiestas decembrinas.
Si la demanda es muy fuerte durante esas fechas, (por ejemplo el rubro de paquetería, alimentos, eventos, etc) Deberás avisar cuales son las fechas que no habrá labores, horarios especiales, si se suspenderán actividades o cualquier otra modificación.
Además de que es un buen momento para agradecer a tus clientes o proveedores por otro año más contigo y enviar tus mejores deseos.
Ignorar el balance entre trabajo y vida personal de los empleados
Una vez que ya tengas planificado (con anticipación) tus próximos propósitos, los horarios especiales por festividades. Debes considerar a una de las partes más importantes de tu empresa, los empleados.
Cabe mencionar que todos tenemos una vida fuera del trabajo, una vida que abarca a los seres queridos y actividades. La humanización en una empresa no debe de faltar en estas fechas de agradecer y compartir.
En caso de que haya labores durante las fechas festivas, es importante que avises con antelación y sobre todo, que sigas los lineamientos de la LFT sobre los días festivos.
«Los trabajadores no están obligados a prestar servicios en sus días de descanso. Si se quebranta esta disposición, el patrón pagará al trabajador, independientemente del salario que le corresponda por el descanso, un salario doble por el servicio prestado.»
Artículo 73 de la Ley Federal del Trabajo
Además, puedes compensarlo con bonos, regalos, despensas, periodos de vacaciones en otro momento, el pago correcto de las horas extra etc. Lo importante es hacerle saber a los empleados que son tomados en cuenta, que agradecer el esfuerzo y el tiempo para laborar en días festivos. Al final obtendrás buenos resultados. No dejes que la humanidad en tu empresa se pierda en estas fechas.
Establecer nuevas metas en la empresa
Si nos cuesta proponernos metas personales para el próximo año, las de una empresa son más complejas.
Esto no quiere decir que sea imposible pero tampoco fácil de hacer. Sin embargo, no todo se concentra en mejorar los números de las ventas. También se trata de otros aspectos que ayudan al desarrollo empresarial.
Para cumplir un propósito empresarial, se deben establecer metas a corto, mediano y largo plazo.
Ponemos como ejemplo un pequeño negocio de repostería. Su año ha cerrado bien, hubo buenas ventas, recomendaciones pero, ¿Qué sigue?, ¿Una expansión?, ¿Aumentar el doble las ventas de este año? Hay que plantearse qué es lo que está en nuestras posibilidades, ya que si nos ponemos metas poco realistas, podemos caer en la desmotivación.
Seguimos con el ejemplo del negocio de repostería, su meta a corto plazo puede ser en probar nuevos materiales para mejorar la calidad; la meta a mediano plazo, crear un modelo adecuado de trabajo para hacer más eficaz y automatizar algunos procesos, como el implemento de pago con tarjeta; la meta a largo plazo puede ser la compra de nuevo mobiliario para que los clientes puedan degustar sus productos dentro de la tienda física, etc. Al final todo es para un propósito establecido desde el principio.
Conclusiones sobre el cierre anual para tu empresa
Es normal que a pesar de planificar las cosas, ocurran cosas inesperadas, como lo puede ser el llegar a una meta antes de tiempo o que las cosas no marchen como se esperan. A pesar de que consideren estos riesgos, se pueden prevenir si existe una organización previa durante el cierre anual en la empresa.