Definitivamente el gobierno tiene que ser creativo para buscar atraer inversiones del extranjero en nuestro país, pero también hacer crecer a las empresas mexicanas. Estos decretos no son una «ganga» precisamente, pero el de repatriación de capitales está mejor que el anterior al aplicar una tasa ciega del 8% a los ingresos que retornen y se reinviertan en México, considerando que muchas de estas inversiones no pueden justificar un costo importante.
El esquema de deducción inmediata, sólo considera porcentajes no es toda la adquisición, y no considera ni a los autos ni al equipo de oficina, pero por algo se empieza.