Los cambios que se plantean a la Ley del Seguro Social (LSS) dentro de la reforma hacendaria plantean un «rebalanceo» en las cuotas que aportan los patrones, las cuales aumentarán sólo para quienes tengan trabajadores que ganen más de 3.6 salarios mínimos diarios.
Las principales modificaciones a la LSS corresponden a las aportaciones de Seguro de Enfermedad y Maternidad, el cual otorga a los trabajadores afiliados al IMSS y, en su caso a sus familiares, prestaciones en especie y en dinero, en caso de enfermedad no profesional o maternidad.
Especialistas en seguridad social explican que lo que busca la propuesta de reforma a la LSS es incentivar a los patrones para que den de alta a sus trabajadores por lo menos con el salario mínimo, quienes incluso serán apoyados por el gobierno con una aportación subsidiaria.
Lo que no se es que vaya a pasar después con los funcionarios del IMSS que mandan «invitaciones» a todos los empresarios que tienen trabajadores con menos de dos salarios mínimos para que los patrones ajusten los salarios de los empleados, porque no se explican como alguien puede ganar tan poquito.