A este tipo de comprobantes ya no hay que agregarle nada, ni quitarles nada tampoco, recuerden que para estos comprobantes cualquier requisito se debería poner de manera pre-impresa en un establecimiento autorizado.
Por lo que el uso de parches, correctores o sellos para incorporar los nuevos requisitos, puede llegar a invalidar el comprobante, y tampoco se puede pensar en buscar a un impresor autorizado porque este tipo de servicio se dejó de prestar desde 2011.
Tal y como fueron impresos hasta el 31 de diciembre de 2010 son válidos y deducibles.
Artículo Décimo Transitorio fracción II del CFF
Categorías